Sabido es que en este blog se publican convocatorias varias sobre todo tipo de concursos nacionales y extranjeros relacionados al diseño. Sabido es que mucha gente esta en contra de los concursos por que los consideran un abuso y una especulación hacia el trabajo del diseñador. Personalmente considero que hay algunos concursos que valen la pena y que en ocasiones son benéficos. Ya depende de las circunstancias de cada quien si participa o no.
En este caso quiero traer a colación un tema que el buen Cybergus, como ya es usual puso en la palestra. Se trata del concurso “My Photocomic” auspiciado por la multinacional Unilever, y que entre sus condiciones de participación trae estas perlitas:
- En este acto, LOS PARTICIPANTES ceden todos los derechos de propiedad industrial o intelectual que se generen en relación con la promoción denominada “My Photocomic” y de manera especial todo lo relativo a las fotografías enviadas con su historieta o comic, en lo sucesivo “El Material” a UNILEVER con motivo de la promoción antes citada, son propiedad exclusiva de UNILEVER en todas las modalidades conocidas y por conocerse, para todos los efectos legales a que hubiera lugar, y que podrán ser explotados por UNILEVER a su entera discreción.
- LOS PARTICIPANTES se obligan a no registrar ningún derecho de autor, marca, patente o cualquier derecho de propiedad industrial o intelectual en relación con la información proporcionada por UNILEVER o sus compañías subsidiarias o afiliadas, o generada con motivo del objeto de la promoción denominada “My Photocomic” ya que tal información será propiedad exclusiva de UNILEVER o sus compañías subsidiarias o afiliadas y en consecuencia será exclusivamente esta última quien pueda registrar los derechos de autor e industriales correspondientes. En su caso, desde este momento LOS PARTICIPANTES ceden en favor de UNILEVER o sus compañías subsidiarias o afiliadas todos los derechos de autor e industriales que pudieran derivarse de la promoción denominada “My Photocomic”.
Así sin más, de un plumazo tus fotos, ya no son tus fotos… y ellos pueden comercializar a discreción tu trabajo.
Simplemente inadmisible, hagámonos ecos, estudiantes, diseñadores profesionales o amateurs. Simplemente hay que boicotear ese absurdo concurso, al menos hasta que cambien esas ridículas bases.