Tengo la fortuna de vivir y trabajar en la zona en la que opera #UberPool, gracias a eso lo he usado desde el primer día en que estuvo disponible, casi 10 viajes han transcurrido desde entonces. En la mayoría de ellos, mi compañer@ de viaje va en el teléfono, a veces en una llamada telefónica, otras tantas con cara de “estoy atendiendo algo muy importante” mientras en su pantalla se ven videos graciosos de Facebook. Mi viaje ayer fue diferente, déjenme contarles porqué.
Me subí y, como se costumbre, mi compañero estaba al teléfono. Tras el saludo de cortesía cerré los ojos (estaba cansadísima), no pude evitar escuchar su conversación y, en un momento en que la misma se prestó para ello, me reí. Un minuto más tarde colgó y yo abrí los ojos. “¿Porqué siempre me tocan personas que vienen al teléfono en los #UberPool, es una regla que no conozco o algo así?”, le pregunté. “Supongo que es para aprovechar el tiempo, o por miedo a la idea de tener que hablar con un perfecto desconocido”, contestó.
Ambos sonreímos.
“Pero… tú no eres un completo desconocido, sé como te llamas, eso ya nos libra de la primera pregunta, ¿no?”
Seguimos el camino juntos, era tarde, ambos íbamos ya rumbo a casa. Gracias al tránsito lento que hay casi siempre de Polanco a la Roma, platicamos un poco de todo; él trabaja en una empresa que se dedica a rentar oficinas a negocios de alto perfil, yo hago comunicación digital, vivimos por la zona, frecuentamos lugares similares, hemos ido a un montón de conciertos en común… y vinimos a encontrarnos en un #UberPool.
Ya les decía yo a mis amigos el otro día… que yo no bajo Tinder porque, cuando estoy a punto de hacerlo, siempre conozco a alguien. Y ahora encima de todo es alguien que trabaja cerca de mi oficina y vive cerca de mi casa. Lo que si es que ya no podré decir que yo no uso aplicaciones para conocer personas y tener citas o encontrar personas afines, sin querer… caí.
Por esa razón, creo que ahora ya no serán solo los taxistas quienes se quejen de que Uber les quita el trabajo, quizás ahora Tinder, Ok Cupid y otras apps por el estilo se unan a ellos en sus protestas, marchas y quejas. Si los muchachos de Uber detectan la posibilidad a tiempo, puedo imaginar una campaña de “Speed dates” para el 14 de Febrero, en la que se aseguren que tu viaje compartido será con alguien del sexo opuesto (o del mismo sexo, si así lo prefieres… o con más de una persona, si eres muy de mente abierta). Un mundo de posibilidades…
Y ustedes, ¿ya usaron #UberPool?