Criado en el campo a las afueras de una gran ciudad, Kwang Hoo Lee comenzó a construir y hacer cosas con sus propias manos desde muy pequeño, fue de esta manera que comenzó a ganarse la vida. Comenzó con pequeñas artesanías, luego muebles pequeños, envases, etc. todo con el sueño de un día poder producir y distribuir a lo grande sus obras.
Actualmente sus obras son expuestas en museos y vendidas en grandes galerías, sostiene que su inspiración más grande son los recuerdos que guarda de su infancia y usa materiales bastante diversos para sus creaciones, acá les comparto algunos ejemplos de estas: