El sueño de varios tuiteros ha llegado, por fin dejarán de hacer corajes y/o lanzar indirectas en 140 caracteres hacia aquellos “ladrones” de sus publicaciones, pues parece ser que Twitter ha comenzado a sancionar a aquellos usuarios que roben tweets.
Todo comenzó un buen día cuando la escritora independiente Olga Lexell, publicó un pequeño comentario sarcástico en su cuenta, que decía algo así como:
Vi a alguien derramar su costoso jugo orgánico en la acera y ahora sé que Dios está de mi lado.
Fue entonces cuando a varios usuarios se les ocurrió que sería buena idea adjudicarse ese texto, ya se cambiándole un poquito la redacción o de plano fusilándoselo (por si no me expliqué, fusilándoselo significa “robándoselo”), un comportamiento que es o era bastante común en la red social del pajarito azul, pero cuál fue su sorpresa cuando unas horas más tarde en lugar de dicho texto copiado apareció la leyenda:
Este tuit de @[Nombre del Usuario] ha sido borrado en respuesta a un reporte del autor del contenido
Así es queridos lectores, parece ser que esta fue la manera en la que Twitter atendió la queja formal que Olga Lexell presentó al darse cuenta de como estaban plagiando su tuit. Olga comentó lo siguiente para The Verge:
Yo simplemente le expliqué a Twitter que como una escritor independiente, gano mi dinero escribiendo chistes (y uso algunos de mis tweets para probar chistes y otros escritos). Luego expliqué que por ello, los chistes son de mi propiedad intelectual, y que los usuarios en cuestión no tienen mi permiso para publicarlos sin darme el crédito.