Los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018 han resultado ser todo un éxito como terreno de prueba para llevar la tecnología a unas instalaciones de mayor tamaño: en las Olimpiadas de Tokio 2020 y el despliegue generalizado a escala mundial de los estándares comerciales y redes 5G a lo largo de ese mismo año.
Como socio olímpico de los Juegos Olímpicos hasta 2024, Intel y KT, Socio Nacional de PyeongChang 2018, ofrecieron la mayor red 5G a gran escala durante las Olimpiadas, un despliegue que ha incluido más de 22 enlaces 5G en 10 sitios y que ha logrado proporcionar 3.800 terabytes de capacidad de red. Kit de prensa: Intel en los Juegos Olímpicos.
Ahora que concluyeron los Juegos Olímpicos de Invierno y miramos hacia el futuro, Intel está entusiasmado con el anuncio de su colaboración con NTT DOCOMO, Socio Nacional de Tokio 2020, para el suministro de tecnologías 5G, una asociación que va a facilitar soporte a las infraestructuras de red, a la conectividad y a la colaboración en nuevas experiencias para las próximas Olimpiadas de 2020.
A continuación, damos a conocer algunas ventajas que los usuarios esperan:
Video en alta resolución: Transmisiones de video en 8K y 360º para mostrar la acción en tiempo real en dispositivos de alta resolución en las instalaciones olímpicas. De esta forma, los espectadores se sentirán como si ellos fueran los atletas. Los aficionados van a poder formar parte de la acción, usando para ello la realidad virtual potenciada por la tecnología Intel True VR, ya sea desde televisores, con cascos especiales o con dispositivos inalámbricos, gracias a unos servicios proporcionados por aquellos canales que cuenten con los derechos correspondientes y con contenidos transmitidos a través de redes 5G transformadas y capaces de transmitir unas cantidades impresionantes de datos a velocidades multi-gigabit.
Sensores para ciudades inteligentes y vehículos totalmente conectados: Estos avances podrían cambiar la forma de desplazamiento de los aficionados por la ciudad de Tokio. Debido a la incorporación de una mayor inteligencia en dispositivos y en el extremo de la red, las conexiones 5G van a poder ocuparse de las cargas de trabajo que precisan una gran cantidad de datos, como el reconocimiento facial de uso generalizado, una herramienta útil para todos los entornos, desde el acceso a los estadios a la reducción de las amenazas. Intel y otros socios olímpicos pueden ofrecer las últimas versiones de las comunicaciones 5G para vehículos, que ya han conseguido unas velocidades de datos de hasta 1 Gbps para comunicaciones de vídeo de resolución 4K con un vehículo desplazándose a 30 km/h.
Atletas: los atletas también podrán aprovechar la tecnología 5G cuando entrenen o compitan. El acceso a una gran cantidad de datos y analíticas les permitirán hacer correcciones en sus programas de entrenamiento. Los equipos inteligentes para sanidad electrónica (eHealth) y las simulaciones mediante realidad aumentada/realidad virtual (estando todos estos servicios optimizados por las redes 5G) podrán obtener el máximo provecho de la inteligencia artificial para ayudar a los deportistas a mejorar sus resultados en las disciplinas deportivas en las que compitan.
Las tecnologías, los módems y las plataformas de infraestructura 5G de Intel servirán para desarrollar la conectividad gigabit, además de facilitar la creación de nuevas soluciones para movilidad, más experiencias de visualización más inmersiva, aplicaciones innovadoras para la ciudad digital y servicios de emisión avanzados.