El mundo del fútbol mueve pasiones. Son muchas las personas que lo practican semanalmente y que, no conformándose con eso, también lo disfrutan fuera de la cancha como espectadores. Pero no todo es el deporte rey, sino que hay otras disciplinas que levantan pasiones como el baloncesto o la conducción, que también tienen un seguimiento muy amplio.
El deporte no es solo actividad física. A su alrededor se ha creado una economía que depende directamente de él. Ejemplo de ello son, desde las casas de apuestas que permiten realizar pronósticos de aquello que va a suceder, hasta el desarrollo de aplicaciones y juegos realmente increíbles en cuanto a ideas, gráficos y jugabilidad. Ejemplo de ello es el popular FIFA o uno de los títulos más sorprendentes, el Rocket League.
Este último se ha puesto muy de moda entre los usuarios de videojuegos. Se trata de un juego futurista que combina fútbol y vehículos a partes iguales. En pocas palabras, es la disputa de un partido, pero, en vez de jugadores, quienes golpean el balón son coches de diseño extravagante. Nació en 2008, presentó una nueva versión en 2015 y el auge del juego en línea ha hecho que se consolide como un título muy practicado.
Tal es su éxito en el sector que es considerado como un deporte electrónico, los populares eSports, y constantemente se realizan partidas de liga o torneos ampliamente seguidos por streaming. Su jugabilidad es sencilla, los gráficos llaman mucho la atención y otro aspecto que cabe comentar es su componente cooperativo, clave en la modalidad multijugador.
Multiplataforma y ‘Free to play’
Rocket League lo podemos encontrar en diferentes plataformas como, por ejemplo, los propios smartphones y sus tiendas de aplicaciones. También se puede descargar en otros sistemas más completos como los ordenadores gamers o las consolas PlayStation, Xbox o Nintendo Switch. Para su práctica solo es necesario un dispositivo y conexión a la red.
Tan importante es la multiplataforma como que, desde septiembre de 2020, es totalmente gratuito o, como se conoce dentro del sector, ‘Free To Play’. Los usuarios se lo pueden descargar sin hacer ningún pago, un modelo que siguen otros títulos populares como el Fortnite o Halo Infinite. Sí que son de pago, mediante microtransacciones, detalles estéticos de los vehículos.
Estos puntos han impulsado la popularización del título, hecho que ha provocado en alguna ocasión alcanzar un millón de usuarios en un mismo momento. Un deporte futurista e innovador que no se puede descartar que se vea convertido en realidad, algo que sería toda una excentricidad al alcance de muy pocos.
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