Hoy hace 20 años que nació Isopixel.net, algo que significó un antes y un después en mi vida personal y profesional, así que es un buen momento de dar las gracias.
“Que veinte años no es nada” reza el tango de Gardel, en septiembre de 2001 nace Isopixel.net, un weblog en el que recopilaba recursos de diseño, tutoriales, enlaces y demás información en una incipiente WWW. En México no había más que un puñado de blogs y el mío se hizo bastante popular entre la comunidad de bloggers tanto en México, Latinoamérica y España.
¿Por qué se hizo tan popular? Un poco de contexto, estoy hablando de una época en al que Google era una joven startup de 3 años fundada en un garaje de Menlo Park, en California, el rey de las búsquedas en internet en ese entonces era Yahoo! y mucho del trabajo de recopilar nuevas webs se hacía prácticamente a mano. Wikipedia no tenía ni un año de haberse creado, faltaban 3 años para que Facebook viera la luz, cuatro para YouTube y cinco para el nacimiento de Twitter.
Así que un esfuerzo diario de descubrir y curar contenidos valiosos y útiles para ofrecerlos ya digeridos y en bandeja a un montón de gente que no tenía tiempo, ni las ganas de hacerlo, se volvió bastante atractivo para las personas.
Hay que recordar que en ese entonces yo trabajaba en la DGSCA UNAM hoy DGTIC y contaba con conexión de alta velocidad, algo que la mayoría de la gente no tenía en casa, aún el módem y el dial-up eran el pan de cada día. Además, estaba conectado de 10:00 a 20:00 horas todos los días. Era parte de mi trabajo analizar, estudiar y aprender cosas relacionadas con tecnología, web e internet. No había nada establecido y no existía mucha literatura sobre como diseñar páginas web, HTML y CSS, así que había que apañárselas como fuera.
Tras un año de vivir en Blogger (isopixelblogspot.com), decidí que mi hobby merecía hosting y dominio propio. El juguete explotó y se hizo aún más popular. A pesar de todo, yo tenía un trabajo estable y bien remunerado, así que el blog era solo eso, un bonito pasatiempo que mantenía por el mero placer de hacerlo y por pertenecer a una comunidad. Así se mantuvo por ocho años, justo en 2009 decido renunciar a mi trabajo en la DGSCA/UNAM para emprender en el mundo digital y de las redes sociales.
Hagan cuentas, yo tenía 36 años y deje un trabajo de 14 años en la UNAM, era demasiado “viejo” para emprender y para mi era mucho más fácil quedarme como godín asalariado. Si las cosas no hubieran resultado era muy difícil conseguir un trabajo, en la mayoría me hubieran dicho que estaba “sobre calificado” y que no me podría pagar de acuerdo a mi experiencia. Sume usted que, en la UNAM por antigüedad, estímulos y una jefatura mi sueldo no era nada despreciable.
Nada importó, quería seguir mis sueños y fundé una de las primeras agencias de marketing digital en México, Isopixel One, en al que hasta hoy sigo ofreciendo servicios de consultoría, marketing y branding.
Recuerdo con particular afecto a eduMac, una de mis primeras cuentas, que en ese momento se anunciaba en revistas impresas, periódicos, lonas, pendones y volantes de mano en mano en la calle, dada mis experiencia en internet, decidieron contratarme para cambiar todos sus esfuerzos de marketing y comunicación a medios online. En menos de un año de haber implementado toda la estrategia de marketing y comunicación a medios digitales, fue adquirida por Grupo Carso. Con esta cuenta dure al menos cuatros años. Nada mal para empezar.
Como alguna vez me presentó en una conferencia mi estimado Ivan Marchant de Comscore: Raúl empezó a hacer Social Media antes de que se hablará de social media”. Asciéndanla, es me tocó ser de los pioneros de una actividad que hoy es el pan de cada día para las marcas, pero en aquel entonces, muy poca gente sabía que onda con internet como herramienta de comunicación y marketing. Mis 14 años en el Centro de Cómputo de la UNAM (DGSCA/DGTIC), habían rendido frutos.
El blog me ayudó a iniciar mi vida como independiente con mucho empuje, sumado al incipiente poder de las redes sociales, Twitter, sobre todo, plataforma en la que fui de los primeros usuarios en alcanzar 100 mil seguidores (soy el usuario número 72 de Twitter en México), sin saberlo me había dedicado los primeros ocho años de existencia del blog a trabajar un concepto muy popular en estos días: la marca personal, que junto con las redes sociales me dieron el empuje necesario para no arrepentirme de dejar mi zona de confort atrás.
Al final, el blog se convirtió en mi marca personal, sin temor a equivocarme, puedo decir que fui de las primeras personas que empezó a profesionalizar los blogs y que pudieron demostrar que se podía vivir de una publicación independiente que podía competir en un mundo dominado por gigantes como Terra, en aquel entonces, Yahoo y medios como El Universal, Televisa, El Reforma, etc, (hablo de medios populares hace 15 años).
Durante este tiempo mi vida profesional ha tomado diversos caminos, el blog me abrió la puerta a ser director del área de Social media en Campus Party México, uno de los eventos de tecnología más relevantes e importantes de esa época y que me permitió dar una conferencia en el mismo escenario en el que unas pocas horas antes había estado nada más y nada menos que Steve Wozniak, co fundador de Apple.
A partir de allí he dictado más de 100 conferencias sobre diseño, redes sociales, blogs, marketing en diferentes foros de México y el extranjero. Gracias al blog, también he podido viajar a muchos países que en mi trabajo de oficina lo hubiera soñado. Una anécdota: cuando saqué mi primer pasaporte cuando renuncié a la UNAM, lo saqué por diez años, en menos de cinco agoté los espacios para los sellos que te ponen al entrar y salir de un país. Nada mal para un ex burócrata de la UNAM, ¿cierto?
En 2008, también me tocó ser pionero en el tema de apoyo a emprendedores de tecnología junto con queridos colegas y amigos, Café de Altura, la primera iniciativa en México enfocada a descubrir, apoyar a emprendedores digitales.
En 2011 me tocó lanzar en Colombia a Wayra, al lado de José María Álvarez-Pallete, Wayra es un hub de innovación que apoya a emprendedores y startups en tecnologia. También tuve el gran honor de ser parte de las primeras tres generaciones de mentores en Wayra México.
Acotación al margen y toda proporción guardada, Café de Altura pretendía ser como Wayra, pero sin los recurso de Telefónica/Movistar. Paliábamos la falta de inversión con un montón de trabajo y empeño. 😉
También he emprendido en diferentes ámbitos, tengo una marca de mezcal, fundé una empresa de blockchain, la agencia de marketing y diseño sigue vigente (las cagadas monumentales que he hecho no las menciono ahora, aunque son de las que más he aprendido), no ha sido un camino fácil, como en todo, ha tocado aprender a la mala sobre cosas que nadie te dice sobre emprender. Sin embargo, el blog se ha mantenido vigente con sus altas y sus bajas.
Veinte años es un poco más de la mitad de mi vida generando contenidos, no concibo mi vida de otra manera de vivirla, Isopixel el blog y la agencia, son yo y yo, soy ellos, no puedes concebir el uno sin el otro.
Me queda el aprendizaje, la disciplina y el coraje de no ceder, aunque la mar no estuviera en calma, por que no crean que ha sido miel sobre hojuelas, amigos, ha habido ocasiones en que he cometido errores garrafales que han costado mucho dinero, esfuerzo y lagrimas, pero no me arrepiento ni un ápice de las decisiones que he tomado.
Muchas gracias a todos los colaboradores actuales y pasado que durante estos 20 años han formado parte de la familia Isopixel. Muchas gracias a los lectores que nos siguen profesando su atención, gracias a las marcas que han confiado en nosotros, pero sobre todo muchas gracias a la comunidad que he podido aglutinar en todos estos años, y es que al final del día todo se reduce a personas, me congratulo de conocer a un montón de gente valiosa que me ha honrado con su amistad, y eso para mi, amigos, no tiene precio.
Finalizo con un consejo, sí me preguntan si es fácil emprender, hoy les diría que no, definitivamente no lo es, pero ¡es muy emocionante! si ustedes quieren hacerlo, piénsenlo dos veces y si a la segunda siguen convencidos ¡háganlo sin dudarlo! Será la mejor decisión que habrán tomado en la vida.