Los eSports registran niveles récord de audiencia no sólo a nivel global sino también en América Latina. De acuerdo con Newzoo, la transmisión en vivo de juegos superará los 100 millones de espectadores en 2022 y se prevé que crecerá a 122 millones de espectadores en 2024.
Ante esto, vemos que en la actualidad el esport pasó de ser solo un deporte electrónico a una forma de entretenimiento más popular y rentable. De hecho, en general se estima que los ingresos de los deportes electrónicos en América Latina ascenderán a 58 millones de dólares en 2022 y superarán los 71 millones en 2024. Esta suma parece irrisoria frente a las estimaciones globales que oscilan entre los 1.600 y los 3.200 millones de dólares para el próximo año, superando al SuperBowl o la Champions League en términos de ingresos brutos anuales. Por lo tanto, los eports ofrecen múltiples oportunidades para la región.
Para competir y obtener beneficios en los esports es primordial considerarlo como un negocio serio. Las organizaciones deben profesionalizarse y transformarse en empresas como el Real Madrid o el Barcelona, con estructuras de equipo sólidas en marketing y comunicación, administración, recursos humanos y área deportiva, entre las más importantes. Además, por el nivel de exigencia, los gamers, especialmente los profesionales, deben ser considerados como deportistas de alto rendimiento. Talento y habilidades no son suficientes, hay que prepararlos y entrenarlos.
Como los atletas, un equipo profesional de esports requiere de un cuerpo técnico integrado por un preparador físico, un psicólogo, un nutricionista, y poner el acento en la constancia, el esfuerzo, la disciplina y los hábitos saludables.
En Latinoamérica, Isurus, uno de los equipos patrocinados por HyperX, es la marca de esports más exitosa. Fundada en 2011 y con oficinas en México, Brasil, Argentina y Chile, ha superado los cien títulos en más de diez juegos distintos, compitiendo en las mejores ligas regionales e internacionales que se disputaron en Asia, Estados Unidos y Europa.
Pero en una organización de esports no todo es juego y competencia. La comunicación y el marketing juegan un rol fundamental en el posicionamiento de la marca y la generación de ingresos. La creación permanente de contenidos para redes sociales y para plataformas de streaming como Twitch es clave para la captación de audiencia.
De acuerdo con Newzoo, se espera que este año se genere una inversión de USD $641 millones por parte de sponsors a nivel mundial, lo que representa un incremento del 11.6% respecto a 2020. En América Latina, el 60% de los ingresos provienen de patrocinios.