En enero de 2021, hubo 4,660 millones de usuarios de internet en todo el mundo, y un 92% de ellos se conectó a internet a través del Wi-Fi de su teléfono. Sin embargo, pocos saben que el Wi-Fi de un teléfono puede desvelar la ubicación de la residencia de una persona.
Todo lo que hace falta para que alguien descubra la ubicación de tu casa, es el nombre de tu Wi-Fi. Hay webs públicas como Wigle.net que crean mapas de calor de los puntos Wi-Fi. Cualquiera puede simplemente escribir el nombre de tu Wi-Fi en su barra de búsqueda para saber dónde vives. Y, cuando los hackers tengan tu dirección, les resultará mucho más fácil conectarse a tu router y robar tus datos.
¿Cómo hace tu teléfono para desvelar el nombre de tu Wi-Fi?
Un teléfono está buscando continuamente redes Wi-Fi confiables. Cuando una persona está cerca de casa o el trabajo, el dispositivo se conecta automáticamente a la red que encuentre allí. Esto es conveniente, pero, al enviar continuamente estas “peticiones de conexión”, el teléfono facilita mucha información valiosa.
Hay apps que pueden reunir los nombres de todas las redes Wi-Fi cercanas, incluyendo la red de tu hogar. Estos datos se envían entonces a webs como Wigle.net, que enlazan el nombre de una red Wi-Fi con su ubicación. De hecho, ni siquiera necesitas tener la app instalada en tu dispositivo. Es suficiente con que la tenga tu vecino y detecte la señal Wi-Fi de tu hogar.
¿Los hackers pueden saber dónde vives?
Al tener “peticiones de conexión” y combinarlas con los datos de Wigle, los hackers solo necesitan el nombre de una red Wi-Fi para saber dónde vive un usuario. Hay varias formas de hacerlo.
Una persona maliciosa puede llamar haciéndose pasar por el proveedor de internet y preguntar por el nombre de la red Wi-Fi, o enviar un correo de phishing solicitando confirmar los detalles de la conexión. Otra forma consiste en usar escáneres Wi-Fi para captar las solicitudes que envían los dispositivos.
Un hacker puede colocar el escáner bajo un banco en un parque, bajo una mesa en tu cafetería favorita, o simplemente llevarlo en su mochila. No te darás cuenta, pero el escáner registrará de forma pasiva todas las peticiones de acceso Wi-Fi.
El hacker usará entonces un software para ver todas las peticiones que ha captado su dispositivo. De esta forma, verá todas las redes Wi-Fi locales, qué dispositivos están conectados a ellas, y qué dispositivos están “buscando” redes confiables.
Con esta información, es mucho más fácil conectarse a tu router Wi-Fi. Proteger tu router es vital. Al ser un punto de conexión central para todos los dispositivos de tu hogar, tu router controla quién tiene acceso a la red Wi-Fi de tu hogar. Si una persona maliciosa se conecta a esta red, podría hackear tu teléfono, robar tus archivos, espiar en todo lo que haces online, e incluso robar tu identidad.
¿Cómo puedes protegerte?
Pese a que esto suena aterrador, hay formas de protegerte, y muchas de ellas no requieren de muchos conocimientos técnicos.
- Cambia los ajustes Wi-Fi de tu teléfono, o desactívalo. Incluso si tu teléfono está conectado a una red Wi-Fi, esto no le impide escanear el área en busca de otras redes. La forma más fácil de cambiar esto es ajustar tu configuración, o desactivar completamente el escaneo de redes Wi-Fi. Seguirás pudiendo conectarte manualmente a las redes Wi-Fi que hayas guardado (no necesitarás reintroducir la contraseña).
- Cambia el alcance de tu Wi-Fi. Para impedir que tu Wi-Fi aparezca en los mapas de calor, puedes reducir su intensidad. Conseguirás una señal mejor si tu router se encuentra en un espacio abierto que si está en un armario, pero no necesita ser tan fuerte como para que tus vecinos también puedan usarlo.
- Usa una VPN en tu router Wi-Fi. Una VPN puede encriptar el tráfico de todos los dispositivos conectados al Wi-Fi de tu hogar. Como desordena todos tus datos online, tu tráfico aparecerá como un auténtico jeroglífico para cualquier hacker que trate de interceptarlo. De esta forma, los delincuentes no podrán acceder a tus datos, ni siquiera si hackean el router.