El robo de identidad es un delito que ha crecido de manera exponencial en todo el mundo, y México no es la excepción. En América Latina, este país se encuentra en una posición preocupante en cuanto a la cantidad de casos de robo de identidad. Según datos proporcionados por Veridas, empresa especializada en soluciones de verificación y autenticación de identidad México se ubica entre los países con mayor incidencia de este delito en la región.
De acuerdo a la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), México registró 24.215 reclamaciones por robo de identidad durante el 2021, un 52% más que en el 2020, especialmente a través de instituciones financieras. Estos datos revelan la magnitud del problema y la necesidad de tomar medidas efectivas para combatirlo.
Los ciberdelincuentes utilizan diferentes métodos para acceder y sustraer los datos personales de sus víctimas. Entre las prácticas más comunes, destacan:
- Phishing: Con este método, los estafadores se hacen pasar por una institución (banco, aseguradora…) para recabar datos personales y contraseñas por medio de correos electrónicos o SMS.
- Pharming: Consiste en reproducir sitios web oficiales, de manera fraudulenta, para que los clientes habituales de una institución operen en ella y filtren sus datos personales y contraseñas. Este método es más sofisticado y requiere una mayor infraestructura.
- Malware: Los ciberdelincuentes se hacen con la información personal de una persona a través de virus electrónicos que infectan móviles y ordenadores.
- Hacking: Se accede a los dispositivos de distintas maneras; como por ejemplo a través de una red Wi-Fi. Una vez dentro, pueden acceder a nuestros datos personales a través de móviles, ordenadores o incluso smart TVs.
¿Cómo podemos evitar el robo de identidad?
Para las empresas, resulta un reto encontrar el equilibrio entre seguridad y experiencia de usuario. Normalmente, añadir capas de seguridad extra a un proceso repercute negativamente en la experiencia de los usuarios.
Sin embargo, gracias a la biometría, podemos evitar el fraude de manera efectiva en los procesos de interacción online con nuestros clientes al mismo tiempo que los hacemos más ágiles e intuitivos para los usuarios.
A continuación, Veridas comparte 3 medidas que te ayudarán a erradicar el fraude de identidad en tu empresa.
1. Validación avanzada de documentos de identidad con tecnología NFC
En un proceso de alta de cliente, el primer paso que se realiza es la verificación del documento nacional de identidad. Veridas cuenta con un motor de Inteligencia Artificial que cuenta con tecnología antispoofing que es capaz de identificar intentos de fraude como fotocopias o alteraciones en la información del documento.
2. Comparación biométrica y prueba de vida
Puede darse el caso de que los ciberdelincuentes intenten cometer ataques fraudulentos con documentos de identidad válidos. Por ello, resulta vital ligar la identidad verificada en el documento con la de la persona que está realizando el proceso detrás de la pantalla.
En este punto es donde entra la tecnología de reconocimiento facial. A través de un selfie que realiza el usuario, se compara esa imagen con la que está presente en el documento de identidad y se analiza si se trata de la misma persona.
3. Software de detección de fraude
Las dos medidas mencionadas anteriormente evitan el fraude en el alta de nuevos clientes. Sin embargo, puede ocurrir que ya existan clientes fraudulentos dentro de la base de datos de tu empresa. En ese caso, Veridas cuenta con una solución para la detección de identidades duplicadas que permite escanear toda tu base de datos en cuestión de segundos. De esta manera, podrás saber si alguien se ha registrado varias veces con identidades falsas.
Las consecuencias del robo de identidad son graves y pueden afectar profundamente la vida de las víctimas. Además de las pérdidas financieras, que pueden ser significativas, las personas y empresas que han sido víctimas de robo de identidad también pueden enfrentar problemas legales y dificultades para recuperar su reputación. La restauración de la identidad y la reparación de los daños causados pueden llevar mucho tiempo y esfuerzo. En el caso de las empresas, el robo de identidad puede afectar también su imagen y reputación, lo que puede conllevar a una pérdida de confianza en la misma.