Leer nos transporta a mundos diferentes, nos hace conocer a otros personajes y desata nuestra imaginación. Cada 23 de abril se celebra el «Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor». La celebración de esta jornada sirve para atraer a la causa de los libros y del derecho de autor a un gran número de personas de todos los continentes y orígenes culturales.
En este sentido, las nuevas tecnologías continúan ayudando a facilitar la lectura con inventos que van desde los libros electrónicos hasta dispositivos con funciones de lectura para personas invidentes, con baja visión o dificultades para leer de la empresa israelí OrCam Technologies.
El origen de la celebración hay que atribuírselo a la UNESCO que, en su Conferencia General de 1995 celebrada en París, decidió rendir homenaje al día en el que fallecieron Cervantes y Shakespeare. La fecha la conmemoran hoy millones de personas en todo el mundo, que desde sus asociaciones, escuelas y organismos públicos, impulsan iniciativas de sensibilización y reflexión por la lectura.
En los últimos cinco años, el fomento y cultura de la lectura en la población mexicana ha ido en disminución, según los resultados del Módulo sobre Lectura (MOLEC) 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), que indican que del 2016 a la fecha, la población lectora se redujo del 80.8% al 72.4%, es decir casi 10 puntos porcentuales. Los mexicanos leen en promedio 3.4 libros al año, siendo un poco mayor la cantidad en el caso de los hombres, que en las mujeres.
La lectura forma parte de nuestro proceso de aprendizaje, es un proceso gradual que comienza en las etapas educativas iniciales y se va perfeccionando a lo largo de gran parte del periodo escolar. Tanto la lectura como la escritura son habilidades necesarias para establecer, de forma progresiva, aprendizajes más complejos. Cuando el aprendizaje de la lectura no tiene la evolución esperada en acorde a la edad y al nivel de inteligencia del niño o del adolescente, hablamos de trastorno específico de aprendizaje.
Este problema conlleva una dificultad para aprender las aptitudes académicas básicas que tiene lugar durante el periodo de desarrollo, que coincide con la etapa escolar. Las aptitudes académicas básicas incluyen: la lectura de palabras, la comprensión de la lectura, la expresión escrita, la ortografía, el cálculo y el razonamiento para resolver problemas matemáticos.
“OrCam Technologies tiene el objetivo de ayudar a personas con diferentes dificultades para leer, ya sea baja visión o ceguera. Acercar la lectura y permitir que todo el mundo pueda disfrutar de un buen libro es verdaderamente un reto del que estamos muy contentos de haber conseguido” asegura Bari Hayoun director regional de OrCam Technologies para LATAM y España.
Inteligencia artificial y lectura.
Las nuevas tecnologías continúan ayudando a facilitar la lectura. OrCam MyEye2.0, que está disponible en España y en castellano, es un dispositivo desarrollado por la empresa israelí OrCam Technologies. Tiene el tamaño de un dedo y se acopla a la patilla de las gafas mediante unos imanes. Basándose en el aprendizaje por inteligencia artificial de los algoritmos desarrollados, permite a las personas con discapacidad visual la lectura periódicos, libros, menús, señales, etiquetas de productos, pantallas de ordenador y teléfono.
El dispositivo nos introduce en el concepto de la lectura interactiva, desde la cual podemos ampliar conocimientos. “OrCam MyEye ayuda a que el amor hacia la lectura continúe propagándose en todo el mundo” comenta Bari. El formato es lo de menos, lo importante es leer. Escoge títulos que te hagan disfrutar, que te aporten felicidad, que te ayuden a superarte y a afrontar nuevos retos.