El desafíao de vivir desconectado. ¿Te atreverías a dejar tu celular por 48 horas? Motorola y Discovery se lanzan a responder esta pregunta, o más bien, que sucede cuando una persona que literalmente está encadenada al uso de su móvil lo tiene que dejar voluntariamente.
El otro día hablaba en televisión sobre la Nomophobia, el miedo irracional a querrase sin celular, las personas que por alguna razón se quedan sin móvil, ya sea por que lo pierden, se quedan sin batería o sin saldo, literalmente sienten ansiedad, temor, enojo e inseguridad, en un grado muy alto. tenemos esta extraña sensación de estarnos perdiendo de algo, ya sea en el trabajo, con los amigos o la familia.
En The disconnected challenge se muestra cómo tres personas de México, Argentina y Brasil se enfrentan a momentos inesperados al tener que trabajar y desarrollar sus tareas cotidianas sin utilizar sus smartphones ni contar con conexión a internet. El programa es una continuación de la campaña Phone-Life Balance de Motorola, que busca un mejor equilibrio entre la vida y el uso del teléfono.The disconnected challenge by motorola se estrena el miércoles 27 de marzo a las 23:15 hs., por Discovery Channel.
En el programa tres personas abandonan sus smartphones y cualquier tipo de conexión a Internet durante dos días para mostrar cómo reaccionan mientras intentan resolver de manera analógica todo tipo de situaciones que surgen en su rutina diaria.
Con el aporte de los neurocientíficos Andrés Rieznik y María Eugenia López, The Disconnected Challenge by Motorola estrena el 27 de marzo a las 23.15 hs., por la pantalla de Discovery Channel.
El programa de media hora de duración, sigue durante dos días a Gema, una wedding planner mexicana; Macarena, una bailarina argentina; y Víctor, un estudiante de Publicidad brasileño.
A medida que pasan las horas, el comportamiento de los personajes cambia y descubren cómo hoy los dispositivos inteligentes se han convertido en una herramienta muy útil para desempeñarse tanto laboral como socialmente y empiezan a experimentar qué relación tienen con sus dispositivos.
El desafío surgió como parte de la campaña Phone-Life Balance de Motorola.“Como creadores del primer teléfono móvil de la historia, nos sentimos responsables de analizar el impacto de esta tecnología, sin que se convierta en el centro de nuestras vidas. Un concepto que presentamos el año pasado, y al que denominamos Phone Life Balance, y sobre el que seguiremos hablando para encontrar un mejor equilibrio entre el uso del teléfono móvil y la vida personal”, comenta Mardya del Valle, gerente de marketing de Motorola México.
“Como creadores del primer teléfono móvil de la historia, nos sentimos responsables de analizar el impacto de esta tecnología, sin que se convierta en el centro de nuestras vidas. Un concepto que presentamos el año pasado, y al que denominamos Phone Life Balance, y sobre el que seguiremos hablando para encontrar un mejor equilibrio entre el uso del teléfono móvil y la vida personal”, comenta Mardya del Valle, gerente de marketing de Motorola México.
“Algo que nos pasa a todos con el celular es que hemos dejado de ejercitar partes del cerebro que antes utilizábamos más frecuentemente, que tienen que ver con, por ejemplo, la orientación espacial y la navegación en el espacio”, comenta Andrés Rieznik, doctor en Física y neurocientífico, quien a lo largo del programa aporta conceptos y conclusiones que ayudan a comprender las reacciones de los participantes durante su período de desconexión.
“Hay muchas cosas que actualmente no podemos hacer sin nuestros celulares, pero este experimento social también demuestra que el hecho de estar un tiempo desconectados de estos dispositivos nos permite reconectarnos con nuestro entorno y con las personas que nos rodean. La cuestión es llegar a un punto de equilibrio para no alejarnos de los beneficios que brinda el contacto interpersonal”, completa Rieznik.
The Disconnected Challenge
Gema Kareh es una wedding planner mexicana de 49 años muy meticulosa, quien manifiesta “no poder vivir sin el celular” por ser su principal herramienta de trabajo. Concertar reuniones con las novias que la contratan, hacer compras, solicitar y compartir presupuestos, trasladarse por la ciudad son algunas de las actividades que tendrá que resolver durante dos días sin su gran aliado ni cualquier otro dispositivo conectado a Internet.
Macarena Fuentes es una bailarina argentina de 30 años, quien confiesa utilizar “bastante” su celular. Ella toma clases de danza, suele juntarse con amigos, le gusta salir a correr y comer afuera. Utiliza su celular como despertador, para escuchar música, para orientarse en la calle, como agenda, como entretenimiento y para informarse sobre futuros castings. Durante este experimento deberá emplear todas sus habilidades para prescindir de esta herramienta y cumplir con sus tareas diarias con éxito.
Víctor Selqueira Santos es el más joven de los participantes de este especial. Con solo 20 años, no sabe lo que es vivir sin conexión a Internet. Este estudiante de publicidad brasileño utiliza el teléfono celular durante todo el día para su trabajo en una productora audiovisual, para estudiar y para mantenerse en contacto con sus amigos. Sólo deja de usarlo cuando practica surf, yoga y juega al fútbol. A través de esta experiencia de desconexión, Víctor se cuestiona el hecho de depender en exceso del teléfono celular y comprende el valor del contacto personal con quienes que lo rodean.
Para lanzar la campaña Phone Life Balance, Motorola realizó en 2018 un estudio global en colaboración con la doctora Nancy Etcoff, una prestigiosa experta en el Comportamiento Mente-Cerebro, y especialista sobre la Ciencia de la Felicidad en la Universidad de Harvard.
El estudio, publicado por Ipsos, analizó los comportamientos y hábitos de uso del teléfono en las diferentes generaciones para comprender el impacto de los smartphones en nuestras relaciones con uno mismo, los demás y el entorno físico y social. El estudio reveló que muchos usuarios anteponen el uso del teléfono móvil a las relaciones con sus seres queridos; y que más de la mitad admite la necesidad de alcanzar un equilibrio en ese aspecto y piden ayuda para lograrlo.
Cada día, los smartphones cambian la forma en que las personas viven. Permiten realizar transacciones bancarias, compras online, estudiar, consultar al médico, comunicarse con otras personas a la distancia y también iniciar nuevas relaciones.
Pero al mismo tiempo que estos dispositivos acercan a quienes están lejos, a veces apartan a las personas más cercanas. A través historias reales y la opinión de expertos, el programa invita a reflexionar para encontrar un mejor balance y disfrutar tanto de la vida real y las relaciones interpersonales como también las ventajas de estar conectado digitalmente.