Una hija del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, y dos de sus ex esposas (Alejandrina Salazar Hernández y Emma Coronel Aispuro) lograron registrar el alias de Joaquín Guzmán Loera como marca comercial “El Chapo”.
ALEJANDRINA GISSELLE GUZMAN SALAZAR lee en el registro, ante eL Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) 24 solicitudes diferentes de registro de marca.
Siendo Alejandrina Gisselle Guzmán Salazar quien presentó 12 expedientes con El Chapo Guzmán, El Chapo, Joaquín El Chapo Guzmán aprobándose cuatro “clases” con el nombre El Chapo , la cual podrá ser utilizada para comercializar cuatro ramos de productos, que incluyen artículos de joyería, relojería, cuero, metales preciosos, maletas, juguetes, paraguas, artículos de deportes y cueros de imitación.
Entre las marcas que pretendieron inscribir figuraban “El Chapo Guzmán”, “Don Chapo Guzmán”, “El Chapito” y “Joaquín El Chapo Guzmán”. Sin embargo, el IMPI negó la inscripción, argumentando que se trataba de “el alias o sobrenombre de una persona que es buscada por la Procuraduría General de la República por la comisión de diversos delitos”.
También se aceptaron otras cinco solicitudes para usar la marca “El Chapo” en otro tipo de productos como instrumentos náuticos, cinematográficos y educativos, pero se desconoce si las personas que obtuvieron la marca están relacionadas con “El Chapo”.
Hoy ya podríamos comprar nuestro reloj marca “El Chapo”, porque el narco no sólo deseaba ver su vida plasmada en la pantalla grande, sino que pensó en ser una marca, una inspiración: quiso paraguas, chamarras, relojes y demás.