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Completa reseña de nuestras primeras impresiones con la Fuji X100, que fue la cámara del 2011 sin duda.
Para algunos ya conocida, la Fujifilm X100 fue sin duda la cámara del 2011. Más allá del “hype” y la controversia entre su gran diseño, sensor APS-C (igual al de la Canon 7D), su visor híbrido electrónico y su pésima interfaz de operación (posteriormente actualizada vía software), representó el surgimiento y recuperación de un segmento olvidado durante años, el del fotógrafo que requería un instrumento serio y portátil, más allá de un simple juguete.
Antes de la aparición de las cámaras “mirrorless”, todo fotógrafo urbano que se dignara a tomarse en serio la oportunidad de lograr buenas imágenes, tenía solo dos opciones, una reflex digital básica o alguna “point & shoot” avanzada. Fue hasta la recuperación de las micro cuatro tercios de Panasonic que los diferentes fabricantes, junto con los avances tecnológicos, vieron en un horizonte diferente de compactas para usuarios exigentes.
La Fuji X100 llegó entonces tirando un poco más arriba, rebasando el formato micro cuatro tercios, es decir como un equivalente 35mm, un solo lente con apertura máxima f/2.0 y una gran calidad en sus imágenes con ISOS altos increíblemente limpios.
Sin duda uno de los ejercicios más importantes en estos tiempos para cualquier creativo, consiste en crear limitantes que lo enfoquen a actuar con los recursos que sean en vez de estar en un ciclo infinito de compras de lentes, nueva cámara, otra vez lentes y así, siempre buscando qué más nos hace falta para “mejorar” algo que no corresponde a la compra de nueva óptica sino a refrescar nuestra visión.
Aunque a muchos fotógrafos nos coquetean las Leica, la justa relación calidad vs precio con al menos tres modelos, daba ventaja a la X100, principalmente por la calidad del sensor y el visor híbrido (sin dejar pasar que luce como una Fujica de los 70s).
La Fuji X100 es un descanso en muchos sentidos, poder cargarla en la bolsa de la chaqueta, descubrir que su “look retro” es perse una cualidad que ayuda a pasar desapercibido como con la cámara del abuelo.
La curva de aprendizaje con la cámara no es sencilla, menos después de haber disparado con cámaras reflex que responden muy rápido incluso en condiciones de poca luz. El uso de la X100 podría resultar frustrante si no se explora el manual, todas sus configuraciones y la actualización del último firmware (software) para corregir gran parte de los errores de interfaz y enfoque.
Muy a pesar de los problemas y críticas que confrontó al inicio, ahora la uso en Modo de Apertura, enfoque manual y asistente de enfoque separado del shutter. Por primera vez cargo una cámara que no intimida a la gente en la calle sino que hasta cierto punto se gana su simpatía y, en el peor de los casos, te hace invisible.
Si quieres ver lo que publico con la X100, puedes entrar a mi Tumblr: http://cybergus.tumblr.com
