Gustavo Arizpe (@gustavoarizpe) me comentaba hace días que Twitter se estaba convirtiendo en un servicio muy similar al email, con la desventaja que ahora este servicio está en manos de una compañía y por mi propia experiencia no parecía exagerar, al menos el 80% de los “followers” que conozco lo utilizan como medio de comunicación alterno al email.
Todo parece funcionar adecuadamente cuando el servicio no falla, pero los que conocemos bien Twitter sabemos que tarde o temprano el temido mensaje “whale fail” se hará presente y nos recordará la fragilidad de un medio centralizado. No puedes fiar tu comunicación a un único medio, no tienes manera de comprobar que tus mensajes están llegando de manera adecuada, no hay un registro de la hora de envío de los mensajes, en suma, ni siquiera tus twitts están seguros, en cualquier momento los dueños del servicio eliminan tu histórico. La idea de un lifestream sigue en utopía, por ahora no hay servidores por más redundantes que estén que aguanten semejante tráfico.
El día de ayer por ejemplo se corrió el rumor de la creación de cuentas pro de Twitter, las cuales tendrían un costo a cambio de más “features. Está noticia ya fue desmentida, pero aunque fuese cierta, no creo que está sea la solución ya que la Web 2.0 es veleidosa y sus usuarios más. Correrían en desbandada hacia otra aplicación que ofreciera algo similar de manera gratuita.
En fin, los cada vez mayores problemas de Twitter nos recuerdan que debemos tener cuidado a la hora de enviar mensajes de trabajo o agendar citas por “replies” o mensajes directos. Si la comunicación asíncrona del servicio es un poco surreal, en estos momentos la situación, prácticamente está de locos (acá lo cuentan a detalle)
Con está breve nota comienzo una serie de posts sobre una de las redes sociales y servicios de microbbloging más populares y que por lo visto, parece estar sucumbiendo de éxito.
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