Frecuentemente, escucho comentarios sobre lo invasivo de la publicidad, que si la privacidad es nula para las marcas, que los medios están saturados, que el zapping, bla, bla… Pueden ser enunciados llenos de verdad, pero el hecho es que soy un amante de la publicidad y de la mercadotecnia; para eso fui “entrenado” y “de eso vivo”…
Mientras reflexionamos al respecto, ¿qué les parece si jugamos a ser bomberos?
¿O mejor nos echamos un futbolito?
¿Qué tal si una belleza árabe nos espía en esos momentos íntimos?